representación de engranajes
llorosos los ojos que miran la pantalla inmóvil,
la imagen del animal muerto abatido
por los escopetazos en el momento cúlmine
de su rebelión y de tan vista sin embargo
fastidia al corazón con la carga de las moscas
como un viento colmado de basura y hojas
secas, la evasión de las ideas borra
como un envoltorio de alfajor esa emoción, la del
momento congelado el tenedor quieto en la mano
y ya no poder comer por la urgencia del llanto
contenido el bocado suspendido el vendaval
de las ideas que se lleva todo resto sensitivo y trae
en cambio las hojitas
crujientes de las asociaciones y las
resonancias políticas del hecho, no es
imposible llorar por estas muertes,
no
4 apreciaciones personales:
no era que eras una mujer cerebral?
¡Claro! De hecho este poema pone en escena cómo hace mi cerebro para desviarme de mis emociones.
Beso Humber
me encanta este poema. me encantan las hojitas crujientes de las asociaciones que vienen después de un profundo rapto de sensiblidad.
te leemos muy felices,
garritas de león para vos
tqm
j.
Gracias Javi. Y gracias por mandarme unas garritas de León, yo también te quiero.
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